Antibioterapia empírica en pediatría

Como amigo y compañero de los padres del primer autor de este libro, he tenido la fortuna de seguir, a una cierta distancia, su trayectoria personal y profesional. El camino vital que Miguel Ángel ha transitado no ha sido nada fácil. Junto con su familia, ha debido superar múltiples obstáculos; pero es muy enriquecedora la fuerza y constancia en el esfuerzo, que les ha permitido a todos ellos, no únicamente superar todas las dificultades, sino mantener la armonía familiar y alcanzar la maestría diaria en sus respectivas actividades profesionales. Y todos ellos siguen empeñados en transmitir esa energía, saber hacer y ganas de aprender, y así ayudar a las nuevas generaciones.

Existen muchos libros acerca del tratamiento antibiótico en Pediatría, desde extensos tratados que incluyen los fundamentos en Microbiología y Farmacología dirigidos a otros profesionales y otros entornos; a excelentes guías con múltiples datos para la consulta por parte de profesionales que habitualmente atienden procesos infecciosos complejos. Miguel Ángel y Rocío han redactado el texto desde su experiencia, tras una intensa formación y tras conocer de primera mano las carencias en el tratamiento antibiótico en Urgencias, y consultando la evidencia científica actualizada.

El autor, desde su trabajo clínico diario como especialista en enfermedades infecciosas, y con la experiencia del libro previo acerca del tratamiento empírico de las infecciones en el adulto (Antibioterapia Empírica), junto a sus colaboradores, ha sido capaz de definir una estrategia adecuada y eficaz de antibioterapia empírica frente a las infecciones más frecuentes en Pediatría, basada en los conocimientos actualizados. Aunque la gran mayoría de los procesos infecciosos en Pediatría finalmente serán de etiología viral (o no aclarada), es fundamental la elección de una antibioterapia empírica adecuada ante la sospecha, clínicamente fundada, de un cuadro bacteriano, teniendo en cuenta las etiologías más frecuentes en función de la edad del paciente. Porque, además, en la edad pediátrica tiene lugar el neurodesarrollo, un proceso crucial y continuo que abarca desde antes del nacimiento hasta bien iniciada la tercera década de la vida. En las infecciones graves, la antibioterapia empírica eficaz mejorará tanto el pronóstico vital como el pronóstico funcional. A este respecto, conviene recordar que la meningitis bacteriana en el primer año de vida es la primera causa infecciosa de discapacidad intelectual.

El texto pretende y logra ser útil para la consulta rápida en el día a día; y, a la vez, permite facilitar el aprendizaje de las enfermedades infecciosas en Pediatría. Consta de 32 capítulos en los que se exponen aspectos teóricos (fiebre, infección, orientación analítica en las infecciones), imprescindibles para el manejo inicial de la infección, y aspectos prácticos que deben conocerse ante un paciente con una probable infección para la elección del tratamiento empírico antibacteriano-antifúngico. Contiene apartados para conocer los principales focos de infección y las situaciones especiales como son infecciones por hongos, infecciones del catéter o la neutropenia febril.

En conjunto, cubre la mayoría de los aspectos prácticos del tratamiento antiinfeccioso en Neonatología y Pediatría.

El libro es reflejo de la personalidad de su autor, es amable, ameno y atractivo, con una enseñanza por pasos, y va dirigido fundamentalmente a aquellos médicos que empiezan la Residencia en Pediatría y especialidades afines. Con una extensión que permite ser fácilmente legible, recordable y aplicable. También va a ser muy útil para estudiantes de grado de Medicina, para definir las  líneas maestras del mapa conceptual de aprendizaje individual, mapa que irán enriqueciendo a lo largo de toda su carrera profesional.

Mi más sincera enhorabuena a Miguel Ángel y a Rocío, a sus colaboradores, y a sus padres. Seguiré aprendiendo de todos ellos.

Antonio Molina Carballo

Profesor titular vinculado de Pediatría

Hospital Clínico San Cecilio. Granada